
CURIOSIDAD PARA LIDERAR
La curiosidad es una competencia clave para liderar.
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Ser curiosx no es preguntar mucho, es preguntar para generar un descubrimiento.
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Es preguntar no para recabar información, si no para generar una transformación en la otra persona.
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Cuando como líder y persona eres curiosa, directamente te posicionas en el papel de "no experta" y desde ahí, puedes unirte a la otra persona en la búsqueda de soluciones y opciones.
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Se despliega una mentalidad colaboradora. Muy alejada de la mentalidad de recabar información, que es mucho más inquisidora y con preguntas que suponen un STOP más que un nuevo descubrimiento.
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Ser una persona curiosa despierta la creatividad en las demás y además retroalimenta.
Es flexible y en esa exploración es donde aparece el aprendizaje que perdura porque "viene de dentro".
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La curiosidad es un poderoso constructor de relaciones y además de alentarla en los demás, es muy reveladora de una misma.
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Es una habilidad que no se apega a ninguna opción y es un talento que si no lo tienes se puede entrenar.
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Hoy quiero compartir 3 herramientas básicas en las que os podéis valorar e incluso, si no lo hacéis empezar a practicar:
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Usar preguntas poderosas: son abiertas y casi siempre invitan a la reflexión
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Aplicar escucha global, atento a las palabras, a la información que te llega por todos sentidos y a los cambios de energía de la persona que tienes delante cuando te está compartiendo.
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Dejar tiempos y tempo para que la persona reflexione.
La curiosidad es un constructor de relaciones de confianza, incentiva la creatividad y es un antídoto de juicios.
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Un líder ha de posicionarse con mentalidad de novato e incentivar dando ejemplo las relaciones conectadas siendo curioso. Atrévete y transforma tus relaciones contigo y lxs demás.